sábado, 11 de abril de 2009

sábado, 10 de enero de 2009

Manfred von Richthofen El Baron Rojo,



Manfred von Richthofen


Manfred Albrecht Freiherr von Richthofen, militar y aviador alemán (Wroclaw Polonia, 2 de mayo de 1892 - † 21 de abril de 1918 (a los 25 años de edad), más conocido como el «Barón Rojo», fue un piloto alemán que consiguió derribar ochenta[1] aeroplanos enemigos durante la Primera Guerra Mundial antes de ser abatido en la mañana del 21 de abril de 1918 cerca del río Somme, en el norte de Francia.

Héroe de los alemanes y respetado por sus enemigos durante la Primera Guerra Mundial, permitía incluso escapar a sus víctimas malheridas. Su unidad fue responsable del derribo de 88 aviones británicos, del total de 151 que abatió la aviación alemana. A causa de ello recibió la Medalla al Mérito Militar.

Sus aviones, el caza Biplano Albatros y luego el triplano Fokker, le permitían una amplia capacidad de maniobras y piruetas. Sin embargo la mayoría de sus victorias en combates aéreos las consiguió en un avión tipo Albatros.


Biografía

Infancia y juventud
Nació el 2 de mayo de 1892 en la ciudad de Breslau, por entonces capital de Silesia, hoy Wroclaw perteneciente a Polonia. De niño se trasladó con su familia a Schweidnitz (hoy Swidnica, Polonia). Era el mayor de tres hermanos. Miembro de la familia aristocrática terrateniente Richthofen, el padre de Manfred había llegado a ocupar un alto cargo en el regimiento de Ulanos nº12, una unidad perteneciente a la poderosa caballería prusiana. Manfred y su hermano pequeño Lothar quisieron seguir los pasos de su padre, alistándose jóvenes en el ejército imperial. Practicó caza y equitación y cuando completó su adiestramiento como cadete, se alistó en los Ulanos (caballería alemana), siendo nombrado tres años después teniente del primer regimiento.

Primera Guerra Mundial

Durante la Primera Guerra Mundial, von Richthofen pasó de la caballería (donde ganó la condecoración de la Cruz de Hierro) a la infantería, pero en esta modalidad no prosperó durante la guerra, ya que las condiciones que se vivían en las trincheras eran inhumanas y "muy aburridas", según sus palabras. Finalmente encontró su lugar bajo el sol alistándose en la aviación, donde demostró una gran capacidad con esta arma completamente innovadora para lo que hasta entonces había sido la guerra (además la producción de aviones se incrementó desde los 300 que tenían todos los contrincantes al principio de la contienda hasta los 150.000 al final). Aunque no logró destacar en la academia de aviadores, luego, en combate demostró ser capaz. Al principio sólo se dedicó a ojear y fotografiar en el frente oriental, pero él lo que quería eran aventuras. En la Luftstreitkräfte, su encuentro con otro gran aviador, Oswald Boelcke, fue decisivo para su éxito. Boelcke lo seleccionó para el grupo de combate Jagdsstaffel o JASTA 2. Ya su primer combate fue una victoria. Sucedió sobre el cielo de Cambrai, Francia el 17 de septiembre de 1916. Durante estos primeros meses se destacó por su agudeza visual y su innato don para afrontar el peligro. Sus compañeros decían que se transformaba su personalidad cuando cogía los mandos de su avión.


Durante los siguientes 20 meses se destacaría como el mejor as de la aviación alemana durante toda la Primera Guerra Mundial. Llegaría a superar el número de victorias de Boelcke, que estaba en 40, récord hasta entonces. En su victoria 11 consiguió derribar el biplano del as británico Lanoe Hawker. En enero de 1917 recibió la Cruz Pour le Mérite.

En 1917 se le confirió el comando del JASTA 11, que luego fue conocida como el Circo Volante, por los vivaces colores que presentaban sus 14 aviones, pues se trasladaban al igual que un circo por ferrocarril adonde se los requería. Se ganó el apodo de Barón Rojo porque su avión estaba pintado de rojo como una manera de que sus rivales lo reconocieran, hábil maniobra psicológica pues sus enemigos lo temían mucho y admiraban su gran destreza guerrera. Llegó a dirigir 58 misiones con total éxito, en las cuales derribó a unos 80 aviones, algo que nadie llegó a superar en ningún bando durante el resto de la guerra. En abril sumó él solo 20 derribos. Sus hombres insinuaban que su líder tenía un comportamiento suicida. Pocos meses después recibió el encargo de dirigir la primera ala de caza de la historia aérea, la JG 1, integrada por los Jasta 4, 6, 10 y 11. Esta unidad llegó a derribar 644 aviones con sólo 56 bajas. Su hermano Lothar alcanzó 40 victorias al final de la guerra con esta unidad, Kurt Wolf, 33 victorias y Karl Allmenroder 30 derribos. Todos lograron la Cruz Pour le Mérite.

El 6 de julio de 1917 recibió una bala perdida en el cráneo, que le provocó una terrible herida lesionándole el cerebro, pero él siguió volando pese a estar claramente incapacitado para soportar alturas. Incluso se comportaba como si fuera inmune a la muerte, no tomando ninguna precaución, violando las fundamentales reglas de vuelo que había escrito en su manual. Llevó vendada la cabeza durante mucho tiempo. Poco después recibió con alegría un Fokker Dr I, un triplano que también pintó de rojo y tenía gran agilidad, pero si se mantenía en rumbo fijo muchos minutos, se convertía en presa fácil.

Su misteriosa muerte.

Según las fuentes oficiales, fue el capitán canadiense Roy Brown el que consiguió matar al piloto alemán, aunque nuevas investigaciones apuntan a que fue el soldado de infantería australiano William John " Snowy " Evans el que disparó desde tierra la bala del .303 que acabó con su vida. La bala entró por el lado derecho del pecho y le causó heridas en los pulmones, el hígado, el corazón, la arteria aorta y la vena cava antes de salir, y según la opinión de los forenses, apenas contó con un minuto antes de perder la consciencia y un par de ellos en morir. Nada se sabe sobre el soldado Evans, aparte de que murió en 1925, y probablemente falleció sin imaginar que él podía ser el causante de la muerte del piloto más famoso de la historia. Roy Brown dejó escrito un libro sobre sus combates y detalló todo sobre el último vuelo del Barón.

Fue enterrado con todos los honores militares por los mismos británicos, quienes salieron a rendirle tributo. Su ataúd -cubierto de flores como ofrenda - fue llevado a hombros por seis miembros del escuadrón 209. En el momento del entierro, soldados australianos presentaron armas y lanzaron tres salvas en su honor. En su lápida, que se encuentra en el mismo lugar donde cayó, se puede leer en su epitafio:
Aquí yace un valiente, un noble adversario y un verdadero hombre de honor. Que descanse en paz.

Tras su muerte, el mando del JASTA 11 lo asumió Wilhelm Reinhardt, y tras su muerte en un accidente aéreo en julio de 1918, lo asumió Hermann Göring, que había obtenido 22 victorias en la guerra y era uno de los ases más destacados de la aviación de caza en esos momentos.

El Barón Rojo dejó un libro escrito durante su convalecencia en 1917 por el disparo en la cabeza. Lo tituló El Piloto Rojo, donde comentaba que combatía en la aviación buscando una consecuencia para su vida.

Datos curiosos.

Era costumbre entre los pilotos tener una mascota. En el caso del Barón Rojo, su acompañante era un perro dogo alemán arlequín (gran danés), llamado Moritz, si bien gran número de esas mascotas morían al seguir ciegamente a sus amos. Moritz tuvo suerte y escapó sólo con una oreja cercenada.

Como todos los pilotos de caza, el Barón Rojo también tenia su manera particular de celebrar cada victoria. En su caso, encargaba a un joyero de Berlín copas de plata de cinco centímetros de altura.

La primera llevaba grabada la inscripción "1 Vickerse 2 17.9.16". El primer número indicaba el orden del derribo, la palabra el tipo de aeroplano, el siguiente número los tripulantes, y finalmente la fecha de la victoria. Con el tiempo, y visto que la colección de victorias aumentaba significativamente, pasó a encargar una copa el doble de grande cada decena. La serie de trofeos se interrumpió después de la victoria número 60, cuando el joyero le comunicó que no había más plata disponible y que sólo podría fabricar copas con un material de peor calidad.

Se decía, en esos tiempos, por superstición, que los pilotos que se fotografiaban antes de un vuelo sufrirían de una terrible mala suerte. La última fotografía hecha al Barón Rojo fue hecha, justamente, sólo segundos antes de que volara por última vez mientras jugaba con un perro.

Después de su derribo, el 6 de julio de 1917, su carácter pareció cambiar a peor. Se mostraba a menudo sombrío, y comentó en muchas ocasiones que "sabía" que no iba a ver el final del conflicto.

Cultura popular

* El grupo español Barón Rojo se puso ese nombre en homenaje al aviador. También le dedica en su primer disco ("Larga Vida al Rock & Roll, de 1981) un tema del mismo nombre, que en su estribillo dice "¡Barón! Héroe de cuento, amo de las nubes, señor del viento. ¡Barón! Vive su sueño, triste y solitario surcando el cielo. ¡Barón! Tu triste misión no apagó tu gloria"

* También el grupo de rock venezolano Arkangel en su primer disco del 1981 y cuyo cantante en aquel entonces fuese el famoso rockero Paul Gillman incluyó un tema con el nombre de Barón Rojo dedicado al aviador alemán, parte de su lírica dice "Vuelas a las alturas, Héroe de mil aventuras y creces entre disparos ,Derribas al que está a tu lado"

* Por su parte, el juego de PC Empire Earth incluye en su campaña alemana varios escenarios protagonizados por el Barón Rojo, basados en situaciones reales, incluyendo uno con su muerte cerca del río Somme.

* A principios de los noventa, la compañía Sierra On Line sacó al mercado el juego Red Baron, ambientado en la I Guerra Mundial y donde se asume la personalidad de un piloto novato. El contrincante más difícil del juego no es otro que el propio Barón Rojo.

* En la tira cómica Peanuts, el personaje Snoopy en una de sus muchas fantasías sueña con ser un as aviador de la Primera Guerra Mundial y tiene al Barón Rojo como su acérrimo enemigo.

* En la serie de televisión Scooby-Doo, los personajes tienen que atrapar a un loco que se hace pasar por el Barón Rojo.

* En la serie de televisión Autos locos, uno de los corredores está basado claramente en el Barón Rojo: El Barón Hans Fritz, que corre en su "Stukarracuda", un bólido con forma de biplano y pintado de rojo.

* En uno de los cortos de televisión de la Warner Bros, Bugs Bunny aparece pilotando un avión en la Primera Guerra Mundial y su acérrimo enemigo Sam Bigotes encarna al mismísimo Barón Rojo.

* En el campo de los tebeos bélicos, Robert Kanigher y Joe Kubert crearon, basándose en el Barón Rojo, para la serie de DC Our army at war al personaje del Barón Hans Von Hammer, un piloto germano de la I Guerra Mundial que, por su pericia, recibió el apodo de "As Enemigo".

domingo, 4 de enero de 2009

Sturmbahnnführer Otto Skorzeny







Otto Skorzeny, nació el 12 de junio de 1908 en Viena, Austria. Su hogar fue el de una típica familia vienesa de clase media. Fue estudiante de ingeniería en la Universidad de Viena, donde destacó también en deportes. Como muchos otros estudiantes, era muy aficionado a las competencias cuerpo a cuerpo y se afilió a la sociedad de duelistas "Schlagende Verbindungen " donde tuvo 15 duelos con sable. En uno de esos duelos recibió un enorme corte en la cara que le dejó una cicatriz permanente en el lado izquierda.

Ingresó al Partido Nacionalsocialista Austriaco en 1930, convirtiéndose en un defensor y promotor de la unión de Austria con Alemania. Después del Anschluss trabajó bajo las órdenes de Ernst Kaltenbrunner. Como era un hombre corpulento, muy atlético y con una estatura de 1,90m fue nombrado miembro del equipo de guardaespaldas de Hitler.

En febrero de 1940, se presentó como voluntario en la Waffen-SS desarrollando una fulgurante carrera militar que de soldado raso lo llevó rápidamente a suboficial y luego a la escuela militar para postular a oficial. Fue subteniente de artillería durante la Campaña de Francia y los Países Bajos, fue ascendido a Teniente y enviado a la Campaña de los Balcanes. También participó en la Operación Barbarossa resultando herido a fines de 1941 y enviado a casa para recuperarse de las heridas.

De regreso al servicio, volvió a destacar notablemente y en abril de 1942, fue condecorado con la Cruz de Hierro. El 18 de abril de 1943 fue ascendido a SS-Hauptsturmführer der Reserve y nombrado comandante de las Friedenthaler Jagdverbande (Grupo de Cazadores Friedenthaler) y "Jefe de las Fuerzas Especiales, Existentes o a Ser Creadas en el Futuro", cargo que pronto desempeñaría bajo las órdenes directas del Führer.

El 29 de julio de 1943, el SS-Hauptsturmführer Skorzeny, fue llamado al Cuartel General de Hitler quien le encomendó el rescate de Mussolini, que se encontraba bajo custodia después de ser despedido por el Rey, al caer en desgracia con motivo de la Invasión de Sicilia. Cumpliendo las órdenes para la ejecución de la Operación Eiche, que estaba al mando del General Student. Student ordenó un rastreo por toda Italia y encontró al Duce retenido en el hotel-refugio Campo Imperatore en el Gran Sasso de los Montes Apeninos. El 8 de setiembre, los alemanes interceptaron un mensaje por radio que confirmó las sospechas y prepararon la operación. El 13 de setiembre Skorzeny dirigió el comando de la Friedenthaler que aterrizaron en planeadores cerca al hotel donde Mussolini se encontraba prisionero. Una vez rescatado, el Duce y Skorzeny volaron en un Fieseler-Storch a Pratica di Mare, donde los esperaba un Heinkel He-111 para llevarlos a Viena. Por esa hazaña, recibió la Cruz de Caballero para su Cruz de Hierro y fue ascendido a Sturmbannführer.

La siguiente misión fue más compleja. En noviembre de 1943, Josip Broz Tito, estableció un gobierno en Yugoslavia y Hitler envió a Skorzeny en febrero de 1944 a Bosnia, para que ejecutara la Operación Panzerfaust cuyo objetivo era matar a Tito, pero el dirigente guerrillero logró escapar. En octubre de 1944, Hitler le encomendó la Operación Panzerfaust que tenía como objeto arrestar al Almirante Niklos Horthy, jefe del Gobierno Húngaro, quien pretendía rendirse al Ejército Rojo. Skorzeny cumplió su misión capturando a Horthy a quien envolvió en una alfombra y lo llevó fuera del palacio, pero Horthly no reaccionó como los lemaanes esperaban. Ante un micrófono y contra lo esperado Horthy dijo que Hungría se había rendido a los rusos y que Alemania había perdido la guerra. Seguidamente la 22 División de Voluntarios de Caballería-SS "Maria Theresa", ocupó Budapest y desarmó al Ejército Húngaro, nombrando un nuevo gobierno. Horthy fue llevado por Skorzeny a Berlín. Los Aliados lo calificaron como "el hombre más peligroso de Europa" y montaron una cacería para capturarlo. La siguiente asignación de Skorzeny fue dirigir a 2000 alemanes, que hablaban inglés, para penetrar detrás de las líneas enemigas durante la Ofensiva de las Ardenas. No logró lo que esperaban los alemanes, pero mantuvo a los estadounidenses en zozobra durante un tiempo.

Al finalizar la guerra, los Aliados comenzaron la cacería de Otto Skorzeny quien, el 15 de mayo de 1945, finalmente se entregó a las tropas estadounidenses. Lo enjuiciaron por crímenes de guerra, aunque no había cometido ninguno, y a la larga fue absuelto en setiembre de 1947. Fue enviado a las autoridades alemanas para el proceso de "desnazificación", pero logró escapar del cautiverio de manera espectacular el 27 de julio de 1948. Se dirigió primero a Austria y luego a España donde recibió la protección del gobierno de Franco y luego se dirigió a Argentina para trabajar con el gobierno de Juan D. Perón, reorganizando la policía y ayudando a inmigrar a ex-combatientes alemanes.

Fue fundador de Odessa, la organización secreta para ayudar a escapar a los alemanes acusados por crímenes de guerra. También, fue contratado como asesor por Gamal Abdel Naser, pasando una temporada en Egipto desde 1953 a 1960. Recientemente se divulgaron hechos relacionados con una supuesta correspondencia extraoficial intercambiada entre Churchill y Mussolini que Il Duce tenía consigo en el Gran Sasso y que Skorzeny guardó celosamente. Con esas cartas y las pruebas de la participación de la Inteligencia Británica en el asesinato de Mussolini, Skorzeny se habría entrevistado con Churchill en Viena, para negociar la libertad de alemanes buscados por crímenes de guerra.

Pasó el resto de sus días en Madrid como consultor de ingeniería y ayudando a ex-miembros de las SS que trataban de eludir la cacería de rusos y judíos. Falleció el 5 de julio de 1975.

Rescate de Mussolini


Skorzeny se dirigió rápidamente al Cuartel General del Este, la Wolfsschanze o la "Guarida del lobo", donde Hitler lo seleccionó de entre seis jefes de la SS para que llevara a cabo el rescate de Mussolini, que acababa de ser traicionado por algunos integrantes de su partido y arrestado, siendo desconocido su paradero. Se le puso bajo las órdenes del jefe de paracaidistas alemanes General Kurt Student.

Desde entonces comenzó a buscar a Mussolini. El gobierno de Badoglio supo de la operación y trato de evitar su ubicación. Skorzeny estuvo entonces exponiéndose en territorio enemigo, llegando a ser atacado por unos cazas británicos que derribaron su Heinkel He 111 por lo que se rompió tres costillas.

Como no quería perder la misión, no guardó reposo y siguió buscando al líder italiano, hasta que descubrió que estaba en el Hotel Campo Imperatore en el pico más alto de los Apeninos, el Gran Sasso.

En efecto Mussolini estaba como prisionero en ese hotel y los carabinieri que lo custodiaban tenía órdenes de ejecutarlo ante el primer intento de rescate o fuga.

Skorzeny pudo percatarse que la operación era arriesgadísima, dada la topografía del terreno que solo daba como solución el aterrizaje sobre una pequeña explanada al borde de un alcantilado, contiguo al hotel.

La operación requería del uso de planeadores y combatientes profesionales experimentados, se emplearon comandos paracaidistas en la misión. Las probabilidades de éxito eran apenas un 20%.

El 12 de septiembre de 1943, a las 12 y 30 del mediodía, Skorzeny junto con nueve aeroplanos despegó hacia el Gran Sasso para rescatar al Duce.

La operación llamada Unternehmen Eiche fue llevada a cabo exitosamente y se rescató a Mussolini sin un sólo disparo, pues los carabinieri se rindieron en el acto.

Mussolini fue embarcado en una avioneta Fieseler Fi 156 donde también viajó el mismo Skorzeny como guardaespaldas de Mussolini. El piloto de la Storch protestó pues el avión era biplaza y Skorzeny y Mussolini sobrepasaban con creces la capacidad de la avioneta de reconocimiento. Skorzeny insistió y el aeroplano a duras penas remontó el aire.

Skorzeny y Mussolini viajaron a Viena en un Heinkel He 111 que estaba allí especialmente preparado, donde fue recibido por Hitler. Skorzeny fue felicitado por el mismo Hitler y se le entregó la Cruz de Caballero, además se le ascendió a Sturmbannführer de las Waffen SS.

Skorzeny demostró que la elección de Hitler no estuvo equivocada. Posteriores hechos demostrarían aún más el valor de Skorzeny.

Operaciones en Yugoslavia y Hungría

El 25 de mayo de 1944 se le encomendó la orden de capturar vivo o muerto al jefe de los partisanos yugoslavos Josip Broz Tito, que estaban causando graves problemas en los Balcanes. Ese mes y el siguiente ejecutó la Operación Rösselsprung, donde envío comandos de paracaidistas al cuartel general de Tito, los alemanes en desventaja numérica lograron derrotar a los partisanos, pero durante el ataque Tito escapó.

Durante el atentado contra Hitler del 20 de julio, Skorzeny se hizo cargo de la situación en Berlín, y fue acabando con los conspiradores uno por uno, sin dormir durante más de 36 horas.

El 10 de septiembre de ese mismo año, Hitler lo llamó de nuevo a la Guarida del Lobo para comunicarle una misión secreta. Allí Hitler le contó de algunos contactos que el regente de Hungría el almirante Miklós Horthy estaba colaborando con el Ejército Rojo, para rendirles el país. Si esto se efectuaba, casi un millón y medio de rusos se abalanzarían sobre un millón de alemanes y se abriría un amplio corredor hacia Alemania y Austria. Se le ordenó que en caso de que se intentara rendir a Hungría, Skorzeny debía tomar el Burgberg, la colina donde residía Horthy.

Después de indagar en Budapest, Hungría, Skorzeny descubrió que el hijo de Horthy, Miki estaba negociando la rendición con partisanos de Tito, por lo que el 15 de octubre se dirigió al hotel donde estaban negociando la rendición y arrestó a los partisanos junto con el joven Horthy. A las pocas horas, Miklós anunció en la radio que Hungría se rendiría a los rusos, por lo que Skorzeny acudió al Burgberg a arrestar al viejo Horthy también. Sin embargo, al temer por la vida de su hijo, Horthy decidió finalmente no rendir a Hungría. Para aquel momento Skorzeny ya había partido a asaltar el Burgberg y nadie se molestó en avisarle la cancelación de la operación.

La Operación Panzerfaust se llevó a cabo esa misma noche, Skorzeny y sus tropas sitiaron la colina, y se pusieron a patrullar alrededor, los húngaros creyeron que los alemanes iban a sitiar el lugar y se confiaron. Sin embargo, inesperadamente Skorzeny subió con sus vehículos armados la colina y después de enfrentarse con los defensores, la tomó, con 4 muertos alemanes. El almirante Horthy fue llevado a Alemania, donde abdicó pocos días después. Ferenc Szálasi lo reemplazó como regente.

Skorzeny se quedó en el Burgberg. El 21 de octubre, Hitler lo llamó al cuartel general para anunciarle que iba a empezar la Batalla del Bulge, (Batalla de las Ardenas) y necesitaba su ayuda para una operación especial.

Operación Greif

El 22 de octubre Hitler le contó a Skorzeny de una ofensiva que llevaría a cabo en las Ardenas, una zona boscosa que comprende Bélgica y Luxemburgo, cuyo objetivo final era la captura del puerto de Amberes, que retrasaría notablemente la ofensiva en el oeste, dándole tiempo a los alemanes de estabilizar el Frente Oriental, así como intentar lograr la paz con las potencias de habla inglesa.

Luego Hitler le contó a Skorzeny acerca de una idea que había tenido al enterarse que algunos norteamericanos se habían disfrazado de alemanes cerca de Aquisgrán. El Führer había decidido que Skorzeny y sus unidades pasarían las líneas enemigas disfrazados de militares británicos y norteamericanos, y sembrarían la confusión entre las tropas aliadas, justo horas antes de iniciarse la ofensiva en las Ardenas. Esta operación secreta recibió el nombre de Operación Greif.

La unidad de Skorzeny poseía 80 soldados que hablaban inglés con soltura, así como 14 jeeps americanos y 60 carros armados camuflados como tanques Sherman. Skorzeny poseía también unos 3500 hombres que pasarían detrás de los soldados camuflados. Después de internar a sus soldados por varias semanas en campos aislados del exterior para enseñarles costumbres americanas, Skorzeny se sintió listo para llevar a cabo la misión.

En horas de la mañana el 16 de diciembre de 1944, dos mil cañones alemanes dispararon al frente de las Ardenas y se inició la ofensiva. Las tropas alemanas se abalanzaron sobre los sorprendidos norteamericanos, sin embargo, a pesar de cumplir sus objetivos iniciales, las bajas fueron elevadas y el avance inicial se detuvo.

Mientras tanto varios jeeps "norteamericanos" penetraron las filas aliadas. Después de sembrar la confusión en el enemigo, incluso desviando importantes unidades desde su destino, la confusión fue total.

Pronto los aliados se percataron que las rutas de sus unidades habían sido alteradas por "oficiales" que estaban en las convergencias de los caminos en jeeps américanos y que sin duda eran infiltrados alemanes. Se tomaron las medidas del caso.

Los alemanes disfrazados fueron uno por uno siendo descubiertos y arrestados. Debido a que utilizaban el uniforme enemigo, se les acusó de espionaje y fueron fusilados inmediatamente, no menos de 200 alemanes fueron fusilados.

No obstante, antes de ser ejecutados los soldados germanos habían declarado, basándose en rumores, que el objetivo de la Operación Grief era asaltar el Cuartel General de Eisenhower y su asesinato. Esto produjó pánico entre los aliados y desató una ola de medidas paranoicas que dificultaron las operaciones militares, tales como el encierro de Eisenhower en el cuartel general por dos semanas. En este período los norteamericanos le asignaron a Skorzeny el título de "el hombre más peligroso de Europa". Sin duda lo era para los aliados.

Mientras tanto, Skorzeny se había dado cuenta que la misión estaba condenada al fracaso, pero bajo la insistencia de Hitler decidió no cancelarla. Un día, mientras se desplazaba por el frente fue alcanzado por metralla que le hirió gravemente en la cabeza y se le envió a Berlín.

Últimos días de la guerra

El 30 de enero de 1945 Skorzeny fue enviado por Himmler al frente del río Oder para detener a los rusos. Con una fuerza de cinco mil hombres, Skorzeny salió a Schwedt a luchar una guerra perdida. Después de reclutar hombres entre antiguos pilotos, heridos, ingenieros, ancianos y adolescentes, aumentó sus fuerzas a casi 15 mil, la mayoría sin mucha experiencia.

El 7 de marzo Skorzeny fue llamado de vuelta a Berlín para encomendarle otra misión. Allí se le comunicó que el primer puente sobre el Río Rin había sido tomado por los aliados cerca de Remagen. Hitler le ordenó a Skorzeny que organizara un comando de hombres rana para volar el Puente Ludendorff. Skorzeny protestó, alegando que las probabilidades de éxito eran mínimas, pero aún así se le encomendó la misión. La operación fue un fracaso y los hombres que no fueron capturados murieron congelados en las heladas aguas del Rin.

Poco después Skorzeny fue llamado de nuevo a Berlín. Hitler, después de entregarle la Cruz de Caballero con Hojas de Roble se despidió. Esta fue la última vez que Skorzeny vio a Hitler.

Cuando su ciudad natal cayó en manos de los rusos Skorzeny partió a Viena para conocer el destino de su familia. En Viena se entrevistó con el antiguo líder de las Juventudes Hitlerianas Baldur von Schirach.

El 11 de abril Skorzeny abandonó Viena. El 8 de mayo de 1945 Otto Skorzeny se entregó al ejército estadounidense.